Las mujeres con curvas siempre me han vuelto loco y de hecho, mi esposa es una chica con kilos de más que me pone a cien. Ella sabe cuales son mis gustos y en base a eso, acabó convenciendo a dos maduras gordas para follar con nosotros en una orgía. Terminamos los cuatro haciendo guarradas en el salón y yo me puse las botas con tanta teta y tanta carne encima, dándome placer por todas partes.