Un día en la oficina, esta secretaria tetona recibió un mensaje perturbador en el que se la citaba lejos de su oficina. Al parecer un tipo quería información de su empresa, algo muy parecido al espionaje industrial. La chica acudió a la cita ya que anda un poco harta de su jefe y de las condiciones de trabajo. Acabó contando todo lo que sabía y a cambio, ese desconocido no solo le ofreció trabajo en su negocio sino también un polvazo allí mismo, que terminó con el coño de la morena relleno con su lefa.