Categorias: Lesbianas
10:07
Hace poco pasó por un sexshop y se compró un arnés con una polla de plástico. Quería darle una sorpresa a una de sus amigas y sin duda consiguió hacerlo, preparando una tarde donde estaba lista para penetrarla. Cuando la tuvo delante y a cuatro patas, empezó a darle caña mientras la rubia gemía sin parar, hasta probar todo tipo de posturas y dejar claro que no necesitan un chico para disfrutar del sexo.