Tres colegas estaban tomando algo y hablando de sus cosas, hasta que la vecina pasó al lado de la ventana y decidió tocar la puerta para hacerles compañía. La rubia quiso hacerles pasar el mejor rato de sus vidas, levantando su falda y dándoles a probar su coño. No estaba en sus planes follarse entre todos a esa golfa, pero no dudaron en seguirle la corriente y hacer que la chica disfrutase de un gangbang, donde probó cada una de esas vergas hasta saborear sus corridas.