Realmente el empollón de clase no es su tipo de chico, pero a esta colegiala latina le daba mucho morbo follárselo, así que quedó con él con la excusa de estudiar. Cuando estuvieron a solas, no paró de flirtear y pudo ver lo tímido que era, algo que la puso aun más cachonda. Acabó llevando la iniciativa y terminó chupando su polla, hasta quitarse la falda y las bragas para cabalgar sobre el chico toda la tarde.